No es Porte de Clignancourt, Puces de Vanves, ni Saint-Ouen...
Pero este finde he podido disfrutar del desembalaje de antigüedades más importante del Levante. Estas imágenes son una pequeña muestra de lo que se pudo ver por allí.
Vestidos de novia de los años 30, vajillas, pañuelos y fulares vintage, puntillas de bolillo, encajes, mapas de anatomía, lámparas, maletines médicos, gorros bautismales, teléfonos, cámaras de fotos, cestas gigantes de pic-nic, pipetas y utensilios varios de botica, broches, camafeos y coronas. Libros, postales, estampas, cromos, pins, soldaditos de plomo... Hasta casullas sacerdotales!! para andar bien cómodo por casa!!
4 comentarios:
Hey!! Yo también estuve allí!!
Desde luego, este mercado de antigüedades no tiene nada que envidiarle a los Marché aux puces de Francia.
Lo que más me gustaron fueron las máquinas de escribir antiguas, sobre todo las pequeñas, ¡son los antecedentes de los portátiles Apple extrafinos, jeje!
Te doy la enhorabuena por las fotos, Alábega. Me han encantado las casullas. Creo que voy a sustituir mi bata por una de ellas.
Muchos besos,
Rastignac
Menudas ferias que teneis por ahí!
Lo que ocurre con los de París es que siempre están puestos!Puedes disfrutar de ellos en cualquier temporada.
Y para esta gran feria hay que esperar un año!!
...las fotos, más bien
regularcillas! No tengo cámara, me la prestaron!
Hasta pronto!
Lo que ocurre con los de París es que siempre están puestos!Puedes disfrutar de ellos en cualquier temporada.
Y para esta gran feria hay que esperar un año!!
...las fotos, más bien
regularcillas! No tengo cámara, me la prestaron!
Hasta pronto!
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