sábado, 26 de septiembre de 2009

Polos



Diseñado a finales del siglo XVIII por el ejército colonial británico, que necesitaba un uniforme con el que poder practicar deporte en un clima húmedo como el de India, el polo es una de las prendas que menos ha evolucionado en la historia de la moda.

De hecho, el único cambio en su diseño desde aquella época tuvo lugar más de 130 años después, cuando René Lacoste introdujo la manga corta. No ha sido por falta de intentos. Bernard Lacoste probó suerte hace 60 años. Decidió darle nuevos aires a la prenda, como respuesta a la competencia que comenzó a hacer Fred Perry desde Inglaterra, pero acabó diversificando los productos y la colección de su firma. No tuvo más remedio que dejar el modelo que su padre hizo famoso en los años 30 como estaba. Cualquier otro cambio lo convertiría en una camiseta, una sudadera o una camisa, y perdería su esencia.
En lo que sí se ha transformado es en su concepción como prenda, que ya no es exclusiva del mundo del deporte. Afín a la moda urbana y a las tendencias, es mucho más que un básico, e incluso hay quien sustituye la camisa con él.

Estampados, a rayas... no faltan propuestas; aunque el liso con tres botones sigue siendo el caballo ganador.

1 comentario:

Anónimo dijo...

¡¡A mi también me encantan los polos!!

Un besazo, Alábega.

Gonzalo